Crónica de la cena de octubre de 2014 en Al Paseo

Crónica de la cena del mes de octubre de 2014

Restaurante Al Paseo, 30 de octubre de 2014

Sorpresa, sorpresa… El inicio de la cena se adelantaba una horita. ¿Estamos rompiendo las tradiciones? Ni mucho menos. La cena del mes de octubre no se iniciaba con en el restaurante donde íbamos a cenar con el aperitivo al que estamos acostumbrados, sino que el punto de reunión fueron las instalaciones de Bentley en el paseo de la Habana. Allí, gracias a nuestro amigo Javier Arias, pudimos degustar de un magnífico cocktail regado por gentileza de Macallan, donde pudimos degustar estupendos Whiskey Sour, Old Fashioned y Horse Neck rodeados de preciosos automóviles Bentley de todo tipo, tamaño y color. La coctelería de whiskey fue acompañada por unos Secretos de Por Larrañaga, que pusieron la guinda a un aperitivo ameno, distinto y, sobre todo, muy agradable.

Cuando terminó el cocktail, cruzamos la calle y entramos en Al Paseo, un restaurante conocido por el club donde ya solemos cenar una vez al año. Recibidos por nuestro gran amigo Eladio Freire, nos sentamos en su acogedora terraza (si, si, terraza en el mes de octubre) calentados por la estructura de estufas y calefactores del local (basta ver las fotos para ver la eficacia del sistema de calefacción).

Iniciamos la cena con un jamón ibérico con patatas soufflé y huevos de corral donde cabe destacar el buen corte del jamón y el punto justo de todos los elementos del plato. Seguimos con una ensalada de gulas y langostinos y terminamos los primeros con unas croquetas de ibérico, unas tostas con foie y sus tradicionales chanquetes de huerta (que ahora son denominados como verduras en tempura). Es sorprendente lo rica que puede estar una verdura crujiente, y, para mi gusto, los chanquetes de huerta de Al Paseo pueden perfectamente ser los mejores de Madrid.

Pasamos a continuación a degustar el segundo plato, donde podíamos elegir entre un Villagodio de buey a la brasa o unos lomos de merluza en salsa donostiarra. Siempre que me ofrecen un Villagodio de al Paseo, nunca dudo en aceptarlo. Consiguen un corte estupendo, ni demasiado fino no demasiado grueso. El salado de la carne con sal gruesa está muy bien conseguido siempre, obteniendo un punto uniforme de sal a lo largo de toda la pieza de carne. Finalmente, la calidad del producto es exquisita, siendo el lugar donde la compran uno de los secretos custodiados por Eladio.

Cuando nos sacaron los postres se inició el reparto del habano que iba a ser fumado por todos esa noche: un Hoyo de Monterrey Epicure número 1 (colección vintage). Esta corona gorda es un claro exponente de la ligada madre de los cigarros de Hoyo de Monterrey, en donde es fundamental el añejamiento de 5 años de sus hojas. Este habano tiene unos tonos amaderados en sus comienzos junto con unos aromas muy intensos que maridaron perfectamente con las copas de Macallan que lo acompañaron.

Mientras degustábamos los habanos, nuestro amigo Joaquín nos realizó unas notas de cata acerca del Epicure número 1 y, como viene siendo habitual, nuestro presidente nos dio una breve charla acerca de la situación del club y las nuevas actividades programadas, siendo la primera de ellas la próxima cena del mes de noviembre en Arce.

¡Allí nos veremos!

 

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